Pese a no ser el más próximo al sol, el planeta del sistema solar con mayor temperatura es Venus, que se sitúa en segundo lugar detrás de Mercurio en lo que a distancia solar se refiere. Las temperaturas que alcanza este planeta pueden superar los 473º, una temperatura suficiente para fundir el plomo.
Venus, el sexto planeta en tamaño (muy similar a La Tierra pero algo más pequeño) es un “planeta horno” con temperaturas elevadísimas. El motivo principal de este clima tan extremo se debe a su composición y al efecto invernadero que causan componentes como el dióxido de carbono que se encuentra en su atmósfera. También contiene Ácido Sulfídrico y Nitrógeno. Su presión atmosférica, para hacernos una ligera idea del clima que nos encontraríamos si visitamos Venus, es 90 veces mayor a la que disfrutamos en La Tierra.
Venus, ¿un antiguo planeta – oásis?
No se tienen indicios de agua líquida en Venus pero hay estudios que afirman que tiempo atrás el planeta pudo contener grandes lagos y océanos en una proporción similar a nuestro planeta. Además, este planeta tiene el récord del día más largo de todos los planetas del sistema solar. Sus días duran 243 días terrestres.
Ya sabes cuál es el planeta con mayor temperatura del sistema solar, un lugar en cuyo interior se fundirá el plomo al entrar contacto con su infernal atmósfera y cuyos días duran 8 meses terrestres. Eso sí, en su día Venus pudo ser un idílico planeta muy parecido a nuestro planeta azul. El destino del universo le llevó a convertirse en un gigantesco horno.
